La compañía de bebidas CCU Argentina anunció durante el Día Nacional del Agua la reducción de su consumo de agua en un 14% durante los últimos 4 años.  

Los resultados fueron posibles gracias a un sólido sistema de gestión ambiental, que permitió obtener la certificación ISO 14.001 para sus tres plantas en Luján, Santa Fe y Salta.

Por cada litro de cerveza terminada en 2009, CCU Argentina empleaba 8,63 litros de agua, cifra que se redujo este año a 7,44; es decir que la empresa mejoró su consumo en un 14%. Esta reducción equivale a 360 millones de litros, agua suficiente para abastecer a 500 familias argentinas durante un año.

“Trabajo bien hecho y por el bien de las personas” afirma la misión de CCU Argentina según las palabras de su Gerente Industrial, Eduardo Cetta. Este objetivo de máxima se sustenta sobre tres pilares estratégicos: rentabilidad, crecimiento y sustentabilidad. “La estrategia medioambiental busca minimizar el impacto de nuestras operaciones sobre el entorno natural, haciendo uso eficiente de los recursos y dando tratamiento seguro a los residuos que se generan”, explica.

En el último año, más de U$S 30 millones fueron destinados a mejorar la operación de las plantas cerveceras, generando trabajo que redunda en beneficios para las comunidades de las que somos parte. No obstante, “este crecimiento no debe ser de cualquier manera, sino de forma sustentable, es decir, asegurándonos de no poner en riesgo el futuro de nuestros hijos y nietos”, advierte Cetta.

Durante el último año, se invirtieron cerca de U$S 2,5 millones en equipos que permiten la implementación de sistemas para reutilizar el agua. Si bien muchas de las mejoras se dan a nivel técnico, en 2012 se instalaron equipos en todas las plantas, que tienen por finalidad permitir la reutilización del agua a lo largo de todo el proceso de producción. Así, por ejemplo, el agua que se utiliza en la lavadora, gracias a un proceso de ablandamiento, puede ser empleada posteriormente, en la etapa de pasteurizado. Esto permite no sólo el ahorro de agua, sino también de energía térmica.

La empresa se propone para 2020 alcanzar un consumo hídrico de 4,5 litros, es decir, 40% menos respecto de los niveles actuales.“Como protagonista de las comunidades en las cuales operamos, asumimos nuestra responsabilidad para con nuestro entorno social y natural. Trabajamos para lograr una convivencia sustentable, conscientes de que para perdurar en el tiempo debemos contribuir para que el medioambiente también lo haga. Cuidar el agua es parte de ese trabajo permanente”, concluye Eduardo Cetta.