El enfoque de trabajo para esta año es el agua y el cambio climático. “No podemos seguir actuando internamente. Ya somos eficientes pero qué pasa con la huella que dejamos por fuera. ¿Qué pasa en la cuenca?”, dijo Diego Molano, director de la Fundación Bavaria, en el evento que organizó la compañía para mostrarle al público los resultados de la medición de su huella hídrica y de carbono.

La organización WWF fue la encargada de realizar la medición de huella de carbono de la cerveza Águila, el producto insignia de Bavaria. Con esta iniciativa la compañía puede establecer cuál es la contribución de Águila al cambio climático. 

Además, se midió la huella hídrica de cinco marcas principales: Águila, Águila Light, Poker, Costeña y Pilsen. Aunque se habla de huella hídrica como si fuera una sola, realmente se están midiendo tres huellas individuales. La huella hídrica verde mide la cantidad de agua que se utiliza en la producción agrícola de materias primas que se necesitan para hacer la cerveza, la huella hídrica azul mide el consumo de agua de ríos, lagos y demás acuíferos y la huella hídrica gris mide la contaminación que se genera en el agua después de un proceso. Los resultados arrojados por Bavaria establecen que el 81% de la huella es verde, el 10% azul y el 9% gris.

Conocer estos resultados le permite a Bavaria saber cuáles son sus riesgos y dónde tiene que actuar para reducir el impacto. La mayoría de empresas que miden su huella hídrica tienen la pretensión de ser más eficientes y reducir su consumo de agua. Bavaria ya lo redujo en un 27%. Sin embargo, la alianza entre Bavaria y WWF pretende ir más allá y trabajar en un proceso de custodia del agua donde se desarrollen acciones colectivas y procesos de gobernanza.

“Tenemos que identificar cuáles son los riesgos que tenemos para poder establecer planes de intervención”, dijo Molano, “No podemos hacerlo solos, la cuenca es responsabilidad de todos”, agregó. El trabajo en cuenca no es fácil ni puede sistematizarse. “Bavaria tiene 8 plantas y no hay una sola que tenga una cuenca parecida a la otra”, aseveró Diego Arévalo, Consultor de WWF en temas de agua. "Es un proceso que toma tiempo pero sobretodo un compromiso empresarial. A pesar de que somos un país privilegiado, maltratamos y abusamos de nuestras cuencas”, dijo Fernando Trujillo, Vicepresidente de Asuntos Corporativos de Bavaria, “tenemos que reaccionar para hacer sostenible nuestras cuencas”.