El programa, titulado "Cambio estructural para la igualdad y la sostenibilidad", especifica las acciones y los objetivos que se espera alcanzar en cada una de esas áreas.

El protocolo, diseñado para el período 2014-2016, da continuidad a la relación de cooperación entre la CEPAL y el BMZ, que desde 2006 se ha plasmado en la puesta en marcha de cuatro programas bienales.

Este nuevo convenio fortalece la alianza estratégica que la CEPAL y el BMZ han construido durante las tres últimas décadas sobre la base de valores compartidos orientados a apoyar los esfuerzos de integración, impulsar el diálogo técnico y político entre Europa y América Latina y el Caribe y promover la sostenibilidad en esta región.

Tras la firma del protocolo, la Secretaria Ejecutiva se desplazó a Berlín, donde ofreció un discurso titulado "Cambio estructural para la igualdad: desafíos y oportunidades para el desarrollo de América Latina y el Caribe en el siglo XXI", en las oficinas del BMZ ante autoridades del Gobierno alemán, diplomáticos acreditados en ese país y representantes de la sociedad civil.

En su exposición, Alicia Bárcena subrayó que la CEPAL propone crecer para igualar e igualar para crecer, es decir, que crecimiento económico, sostenibilidad ambiental e igualdad deben caminar de la mano. "La igualdad supone difundir a lo ancho de la estructura productiva y el tejido social el desarrollo de capacidades, el progreso técnico, plenas oportunidades laborales y el acceso universal a prestaciones y redes de protección social", señaló Bárcena.

La Secretaria Ejecutiva enfatizó que la política macroeconómica y la política industrial no pueden seguir corriendo por caminos separados, sino que deben articularse para construir sinergias en el contexto de la mayor revolución tecnológica de la humanidad que abarca las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones.

Sólo así será posible, advirtió Alicia Bárcena, que nuestra civilización aborde la inseguridad climática que se cierne sobre el planeta y que afectará en particular a los países insulares como el Caribe. Para ello se requiere de un Estado más activo y decidido en políticas de vocación universalista, apuntó.

En Berlín, la alta funcionaria de Naciones Unidas también sostuvo hoy sendos encuentros con Gudrun Kopp, Secretaria de Estado Parlamentaria para la Cooperación, y con Thomas Karl Neisinger, Director Regional para América Latina y el Caribe del Ministerio de Asuntos Exteriores.