Al igual que todas las empresas que cotizan en bolsa suiza, Novartis debe implementar la Iniciativa Minder y adaptar sus estatutos en consecuencia. Uno de los puntos esenciales es especificar las modalidades de votación para la remuneración de la comisión ejecutiva. El salario fijo se vota de forma prospectiva a principios del período en cuestión. Por el contrario, la remuneración variable debe ser votada de forma retrospectiva al final del ejercicio, cuando se conozcan los resultados financieros. Esto permite a los accionistas evaluar la relación entre la retribución variable y el rendimiento alcanzado.

Ethos cuestiona que el artículo 29 de los estatutos modificados prevé que los accionistas voten sobre el monto total de la remuneración de los 9 miembros del comité ejecutivo de antemano, incluyendo la parte variable. Esto lleva a la preocupante situación en la que el importe máximo de la remuneración del 2016 ya debería ser votado, incluyendo el  salario fijo 2016, el bono de 2016, mientras que los objetivos aún no se han definido.

En cuanto a la bonificación de 23 millones de francos suizos para 2016 y el plan de 46 millones de francos suizos para incentivos a largo plazo (2016-2018), constituyen para Ethos un cheque en blanco dado a la junta. “Esta práctica está claramente en contradicción con el espíritu de la Iniciativa Minder que quería que los accionistas aprueben las cuantías retributivas reales pagadas. El anteproyecto de revisión de la ley corporativa suiza presentado por el Consejo Federal el pasado noviembre llega a las mismas conclusiones. Sobre este tema, el Consejo Federal precisa que «los posibles votos en las retribuciones variables son ilegales», afirman desde Ethos.

Ethos también cuestiona la revisión de los artículos de asociación de Novartis. En particular, el hecho de que es posible prever una cláusula de no competencia con una remuneración anual total (salario fijo y bonos), además de los 12 meses del período de notificación estándar. Así, es posible pagar hasta dos años de salario fijo y el bono a una persona que deja la compañía. Esto constituye una indemnización por despido oculto, que está estrictamente prohibido por la Iniciativa Minder, informa Ethos.

En vista de lo anterior, Ethos recomienda  votar en contra de estas enmiendas de los estatutos sociales.