Veintinueve importantes empresas mundiales, incluidas Amcor, Borealis, Danone, H&M, Mars, Nestlé, PepsiCo, Tesco, The Coca-Cola Company, Starbucks, Unilever y Woolworths, han respaldado el llamado a través de un manifiesto comercial que pide un Tratado de la ONU. El manifiesto insta a los gobiernos a negociar y acordar un nuevo acuerdo global sobre la contaminación plástica, diciendo que “no hay tiempo que perder”.

Esta es la primera acción corporativa colectiva que pide a los gobiernos que adopten un Tratado sobre contaminación plástica.

El informe destaca que mediante el establecimiento de una estructura común, se establecería una dirección y unas condiciones claras, dando a los gobiernos y las empresas el ímpetu para avanzar con más decisión. Los autores del informe argumentan que se necesita un acuerdo global que establezca objetivos globales y metas vinculantes, junto con planes de acción nacionales y una medición coherente para armonizar los esfuerzos políticos, mejorar la planificación de inversiones, estimular la innovación y coordinar el desarrollo de la infraestructura. Los firmantes sostienen que si bien las iniciativas voluntarias pueden generar cambios entre los líderes del mercado, se necesita un enfoque vinculante internacional para lograr el cambio necesario a escala de la industria.

El informe concluye que a pesar de que se han duplicado las iniciativas voluntarias y las regulaciones nacionales en los últimos cinco años, los desechos plásticos continúan filtrándose en el medio ambiente a un ritmo alarmante, con más de 11 millones de toneladas de plástico fluyendo hacia nuestros océanos cada año. También plantea que existe una necesidad urgente de ampliar los esfuerzos actuales mediante un enfoque más coordinado y ambicioso.

“En los últimos años hemos visto una creciente demanda pública de acción contra la contaminación plástica, con algunos gobiernos e industrias comenzando a implementar medidas voluntarias sobre este tema, pero esto necesita una mejor coordinación, y el ímpetu y reconocimiento internacional que generaría un tratado global . Si bien las empresas tienen la clara responsabilidad de abordar la contaminación plástica dentro de sus propias cadenas de suministro, es vital un cambio sistémico más amplio. La crisis de la contaminación plástica se creó en una sola vida y puede terminar en una sola década. Pero solo si actuamos ahora, juntos”, dijo Cristianne Close, directora de Práctica de Mercados de WWF International.

Más información: www.plasticpollutiontreaty.org
 

The Business Case for a UN Treaty on Plastic Pollution by ComunicarSe-Archivo on Scribd