En diciembre del año pasado cuando fue aprobada la Resolución para prohibir la entrega de bolsas plásticas de polietileno en comercios de la Ciudad de Buenos Aires, la organización Ecoplas salió a pronunciarse en contra por ser una medida “fundamentalista" y proponía que la mejor opción para el medio ambiente y los consumidores era "el consumo racional, reutilización y reciclado de las bolsas plásticas”.

Luego de seis meses de aprobada la resolución y puesta en práctica la prohibición de bolsas, el Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño habla de "exito" ya que se evitó el uso de 250 millones de estas bolsas plásticas. Sin embargo las autoridades de Ecoplas y representantes de la Cámara de la Industria Plástica salieron a cuestionar los impactos de esta medida.

“La implementación de bolsas plásticas más grandes y resistentes según Norma IRAM N° 13.610 que fue propuesta antes de la prohibición había sido una medida muy exitosa tanto en la Capital Federal como en la Ciudad de Córdoba. Se logró con esta medida anterior una exitosa reducción de hasta un 80% de las bolsas. Estas bolsas resistentes permitían al consumidor reutilizarlas en la separación domiciliaria, diferenciando los residuos reciclables en las bolsas verdes que permitían al reciclador urbano su rápida identificación. Ahora los consumidores no tienen esta opción y deben comprar bolsas en el mercado con precios elevados. Es sabido que 4 de cada 5 hogares reutilizan históricamente las bolsas para los residuos domésticos. Hoy no lo pueden hacer. Por eso creemos que la medida de prohibición es contraproducente”, afirmó Mario Tonelli, Director Ejecutivo de ECOPLAS para ComunicaRSE.

El directivo confirmó el impacto de la resolución sobre la industria del plástico que se vio impactada con pérdidas económicas de hasta $150 millones de pesos, y más de 120 empresas afectadas y 400 empleos caídos.

Ecoplas sostiene que las bolsas plásticas cumplen un papel ambiental fundamental ya que sirven para separación de los residuos en cada hogar y celebran que en Salta Desde el 1 de julio, los ciudadanos de Salta podrán utilizar nuevamente estas bolsas resistentes. 

Otro de los asuntos que preocupa a los directivos de Ecoplas y a los de la Cámara de Plásticos es que la industria del reciclaje trabaja al 50% de su capacidad de producción por falta de materia prima, y esto se debe a un problema en el sistema de reciclaje. "Hoy la mayoría de las 2.800 fábricas argentinas de plástico -en su mayoría pymes- que representan unos 52.000 empleos, y está trabajando con un 40% de su capacidad ociosa porque no cuentan con materia prima suficiente y a buen precio.", describió Sergio Hilbretch, Gerente de la Cámara Argentina de la Industria Plástica (CAIP).

Por su parte,Verónica Ramos, Gerente de Asuntos Gubernamentales y Comunicaciones de Ecoplas, afirmó que “Es importante que toda la sociedad comprenda que el reciclado es la mejor solución para contribuir con el medioambiente y esto sólo puede lograrse con un cambio cultural de todas las  partes involucradas: personas, gobiernos, empresas, escuelas y Universidades. Hay que concientizar al ciudadano sobre la importancia de reciclar. Siempre es más fácil prohibir que educar”.

Junto a otras organizaciones análogas de Europa, Ecoplas es miembro de la red Marine Litter Solution y firmante de la Declaración contra el Residuo plástico Marino. 

 “La problemática de los residuos en los mares -llamada Marine Litter- es una realidad con causas múltiples y complejas. Un tema es el microplástico que se encuentra en todas partes. La industria plástica a nivel mundial está trabajando en diversas acciones para revertirla. Por ejemplo somos miembro de la red Marine Litter Solution que este año en el Foro del Consejo Económico Mundial en Buenos Aires retomó el tema de la basura marina en Argentina,” afirmó Ramos.