En su discurso ante la Cumbre Mundial de Productos de Consumo, Dave Lewis reconoció que todavía muchos de los cultivos de sus proveedores siguen cayendo fuera de los criterios de calidad de Tesco y son susceptibles de ser desechados. Sin embargo, afirmó que se está trabajando para conectar a los productores con los fabricantes para que puedan trabajar juntos y asegurar que ningún alimento comestible se desperdicie.

Tesco ha identificado que los productores y proveedores de alimentos generan la tasa más alta de desperdicio. Lewis cita algunos ejemplos de este trabajo como los productos “Perfectamente imperfectos” que utilizan el marketing para incentivar al consumidor a comprar verduras no perfectas. Al igual que la estrategia 'Compre uno y llévese otro gratis' que ofreció promociones en frutas y verduras.

Otro de sus proyectos busca vincular a los productores de papa con los fabricantes de puré para reutilizar las papas que no cumplan los criterios de calidad de la venta directa.

Además, Tesco ha sumado a 20 principales proveedores a la organización FareShare que trabaja para redistribuir alimentos comestibles a las personas necesitadas. “Muchos de estos proveedores están donando alimentos comestibles directamente a las comunidades en las que operan”, agregó Lewis.

En 2013, Tesco fue el primero de los grandes minoristas del Reino Unido en revelar los niveles de desperdicio de alimentos a través de sus operaciones en todo Reino Unido. La empresa analizó el ciclo de vida de los 25 productos más vendidos para comprender los niveles de residuos de alimentos y donde se produce el mayor desperdicio, con el fin de realizar cambios en sus procesos y reducir los desperdicios.

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