Destacados:

• Nuevo pacto trabajo-familia: apunta a repensar su sentido y cómo se enriquecen mutuamente. Tendemos a pensar que trabajo y familia compiten pero tenemos que ver cómo apoyar una retroalimentación positiva entre uno y otro para que la persona salga enriquecida en los dos ámbitos.
   
• Rol de la paternidad: la mujer ha ido por delante porque ha sido la gran agente de cambio para humanizar más el mundo del trabajo. Pero después de esta primera ola el siguiente paso replantea un nuevo rol de la paternidad. Algo positivo es que las nuevas generaciones quieren estar más presentes con sus hijos lo que los transforma en los nuevos agentes de cambio para tener vidas más equilibradas. Desde el mundo del trabajo debemos fortalecer ese rol de la paternidad.
   
• Recuperar el sentido del trabajo: la gente muchas veces pierde el sentido del trabajo debido a la hiperconectividad que nos hace estar todo el tiempo pendiente de la actividad profesional, invadiendo incluso ámbitos familiares. El sentido del trabajo apunta a no verlo como una mera prestación económica, sino que hay que verlo como un espacio de desarrollo de la persona. Y la persona que va a trabajar es una persona que tiene familia. Además, el trabajo es servir a otro porque de lo contrario nos quedamos en una mera relación contractual que empequeñece su sentido.
   
• El rol de los agentes de cambio: estamos en un desafío que involucra a varios agentes de cambio. En primer lugar cada uno debe ser un agente de cambio. En las empresas los agentes de cambio son los líderes en los distintos niveles, pero sobre todo quienes tienen gente a cargo. El Estado es otro agente de cambio porque muchas de estas prácticas y políticas deberían convertirse en ley y políticas públicas que lleguen a todos los empleados y no sólo a quienes tienen la fortuna de trabajar en empresas ya comprometidas con esto.
   
• Consejos para las mujeres: ser cada vez más mujer, no copiar el estilo del varón porque en ese caso salimos perdiendo tanto varones como mujeres. El gran desafío de la mujer es mostrarle al varón que el ámbito familiar es un lugar de desarrollo de competencias que incluso son valoradas en el ámbito del trabajo. Tenemos que ser conscientes que en nuestras familias se está construyendo el capital humano de un país. Las empresas tienen que pensar en esta responsabilidad familiar. El talento humano que vamos a buscar en las organizaciones de acá a 20 años se está construyendo en las familias de hoy.